26 Abr AGRADECIMIENTO A LAS PERSONAS QUE ESTÁN PARA QUE PODAMOS ESTAR
En estos momentos complejos y adversos, hay muy poco espacio para adaptarse a los cambios y mucho espacio para la reflexión.
Una de las cosas más importantes en estos tiempos, es saber que estás ahí y que estamos. Cada uno a su manera, como puede y como sabe. Hay personas, en estos tiempos que son Ángeles, que cada mañana, cuando saben que empiezas un trabajo que será muy potente sÍ o sÍ, te dan los buenos días, te ponen una canción para empezar el día y te animan con todo el alma mientras sale el sol. Y cuando termina la jornada, te preguntan cómo estás, cómo te ha ido… y te dedican unos minutos de su vida, sin saber quizás, que te la están salvando en muchas ocasiones.
Los Ángeles están donde a veces menos esperas, y los tienes a tocar. Puede ser alguien con quien vives, que discretamente te hace la comida y te espera hasta pasadas las cuatro, para comer juntos. Quizá alguna vecina que no os habíais saludado nunca y que desde el balcón de al lado mueve las manos con entusiasmo y te sonríe. O una compañera de trabajo que bajo mascarillas y batas y demás te ofrece unas mandarinas que son la Pura Vitamina para el corazón. Un mensaje, una llamada, un «¿cómo estás, cómo estáis?», unas magdalenas en la puerta, un dibujo que te llega, las canciones y aplausos cuando haces años en un hospital, la enhorabuena y felicitaciones de toda la planta cuando te dan el alta, los amigos y la familia que de pronto te dicen que te aman como nunca y los que no te lo dicen y sabes que así es. Miradas de complicidad, comprensión, amor, compasión, alegría, miedo y tristeza, acompañando en todo momento, sin soltar el hilo, ni la cuerda, ni los minutos del tiempo que pasa, ligando almas y almas, unas con otras mientras dura esta maratón.
Para poder ayudar, hay que estar bien y recibir ayuda también. Es tal cual “plantar un Castell” como nombran los Castellers, cargar y defenderlo, que para poder subirlo, es necesaria una buena base, haciendo piña si es necesario, y siempre alguien que desde abajo te vaya dando fuerza para seguir adelante. Y si caes, no pasa nada, te vuelves a levantar. Pero siempre sabes que todo el equipo está y tus Ángeles también.